Ultra Bar; Buenos Aires, 21 de octubre de 2008

En vivo: Los Chiflados, Satélite Kingston, Ska Beat City. DJ: Martín Cueto, Visón.

Coordinación de producción: JuanBrass. Sonido: Fabián & Nacho.

Puesto de libros: Adrián Unión y Difusión/Unión Respeto y Ska.

Con la presencia estelar de integrantes y ex integrantes de: Chiflados, Satélite, Ska Beat City, Oxidados, Espías Secretos, Nuevas Raíces, Dancing Mood, Sombrero Club, Dulces Diablitos, Aggrotones, Gordos Olímpicos, Staya Staya, Intocables, Pinche Cabrón, Correcaminos, Insurrectos, Kabuto y Servicio Secreto, entre otros.

Este es nuestro club.

No viene Neville. Pero la fiesta la hacemos igual.

Después de años de forear (alguno, quizás, agregará una "r" al verbo) en satelitekingston.blogspirit.com, varios soundsystems en Alabartola y hasta un libro, nos merecemos celebrar como corresponde.

Y corresponde hacerlo con una fiesta, de una vez por todas. Y la excusa será la salida de "La manera correcta de gritar", el libro que encabeza, cómodo, todas las listas de best sellers en las librerías especializadas en historia del ska argentino. Todas!

Tocarán en vivo Satélite Kingston y Ska Beat City, dos bandas hermandas, por muchas razones, y protagonistas de este blog y también del libro. Piensen que comparten árbol geneálogico con nombres como Riddim, Sir Coxsone, Pinche Cabrón, THC y Nuevas Raíces... ¿Algo más?

Bueno, habrá más. Se espera nada menos que la vuelta al escenario de una mítica banda ska (sorpresa) de los tardíos años 80... Cuyo nombre nadie revelaría ni a cambio de la vida de sus seres más queridos. Y también aseguraron su presencia integrantes de por lo menos media docena de otros grupos de la misma época, para no hablar de parientes directos de... Ronnie Montalbán!

También, en las bandejas, estarán, por supuesto, Cueto & Visón, otros dos protagonistas habituales del blog. Y hasta se prevén sorteos y exposición de material más que histórico...

Ustedes se preguntarán "Y cuánto me va a costar esto?". La respuesta es la mejor parte de todo esto: NADA. Así es, la entrada será libre y gratuita. Años de shows, asados, ensayos, pizzas, notas y contactos tenían que servir para algo, no? Bueno, que sirvan para agasajarlos con esta fiesta. Ahí tienen.

Así que anoten la dirección: San Martín 678, ULTRA.  Y la hora: 20.30 (muy puntual). Y envíen un mail a lamaneracorrecta@gmail.com diciendo "soy rude boy/girl y me gané el derecho a estar presente en tan destacado evento" junto con su nombre y el de sus amigos.

Así es la cosa. Y eso es todo lo que les quería decir.

Un poco de blog sobre blogs... El otro dían un amigo, FV, posteó en su blog (http://tirador-francotirador.blogspot.com/) sobre un fenómeno musical del que, creo, nadie había hablado hasta ahora: la música que te gusta... antes de haberla escuchado.

Era, más que nada, un sinceramiento acerca de aquel raro mecanismo por el cual uno sabía o, mejor, intuía certeramente que un disco era buenísimo antes de saber de qué se trataba. Y no se refería al nuevo lanzamiento de un artista que ya nos gusta sino a algo de lo que no tenemos idea de a qué suena ni a qué género responde. Nada de nada.

Cosas de adolescente. Uno, por una foto en una revista, podía legar a hacerse fan de algo. Mi amigo, por ejemplo, llegó a hacerse una remera de un grupo que nunca había tenido el gusto de oir. Pero de todos modos no se equivocó; terminó siendo su banda favorita.

También le preguntó a otros por experiencias similares. Yo reconocí que, a los 13 años, me consideraba un dedicado seguidor de Joy Division, banda a la que adivinaba misteriosa, oscura y hasta algo peligrosa, y, sobre todo, de la que había escuchado hablar mucho a Luca Prodan. Y me atraía mucho el nombre. Con eso alcanzaba.

Es así. Incluso hay discos que te gustan simplemente por la tapa. Sin duda. Desde muuuy temprano.

Hay alguien en el país catalán que decidió homenajear a las víctimas de fascismo con una serie de imágenes musicalizadas con... "Perdimos", de Satélite Kingston... En You Tube, claro. Y hace poco, unos skins chilenos aseguraban que ese mismo tema hablaba de la guerra de Malvinas.

Ya que estamos, como a mi nadie me entrevistó para "La manera correcta de gritar", no me queda más que aclararlo acá, qué va a hacer. En realidad, esa letra fue escrita de una, apenas minutos después del fatídico show de Satélite, Dulces Diablitos y Espías Secretos en el Abasto, que terminó abruptamente con la irrupción de unos pibes a los que por suerte creo no haber visto nunca más. De recuerdo me dejaron un palo en la cabeza, eso sí...

Alguna vez hasta se pensó ponerle de título la fecha de ese día (que Cotter recordaba perfectamente), pero al final no fue...

"Nuestra única reserva es el rencor"

There's tapas, fracas, alcohol, tobaccos
Bongs, bongo bingo, Portuguese maracas
There's reggae in the jeggae, music everywhere
Every kind of song and dance, madness in the air

In Camden Town I'll meet you by the underground
In Camden Town we'll walk there as the sun goes down
In Camden Town

The tourists sing
Ooooh, they sing

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Las estaciones de subte londinenses son títulos perfectos para discos de ska o street punk que todavía no se grabaron. Igual que las esquinas porteñas son casi todas tangueras. Por ejemplo: Camden, obvio (que sí se grabó). Pero también "Lancaster Gate", "Clapham North", "Hounslow East", "Putney Bridge" o "Sudbury Town".

No hace falta conocer Londres. Pero sí es imprescindible ser melómano. Entonces, mirás el recorrido, y aparecen viejos amigos: el Hammersmith (línea Piccadilly), del tema de The Clash. "Vauxhall" (línea Victoria), de Morrissey. "Chiswick" (Picadilly), del sello (101ers!!). "Waterloo" (Kinks). Brixton, obviamente...

Volviendo a Camden Town, hay dos temas que vienen al caso. Uno, el de la letra de acá arriba, de Suggs, como solista. El otro, de Riddim, por Cotter y Pety, de la primera etapa, anterior al primer CD, de la banda. Se llegó a grabar, a fines de los noventa, en un demo de cinco o seis temas. Es una rareza total, porque no suena ni al Riddim reggae, que el grupo mantiene hasta hoy, ni tampoco suena al Riddim ska, de ese momento. Quizás sea porque en ese tema Sebolla, primer baterista del grupo, usó unos pads electrónicos.

Como sea, es mi tema favorito de Riddim. Y este fin de semana me acordé mucho de esa letra, y de la de Suggs.