Uno de los discos del año o, mejor dicho, dos de los discos del año es o son, sin duda, "The Clash Goes Jamaican", el tributo reggae-ska-rocksteady, en dos vinilos y 30 artistas, editado por Golden Singles, en España. Aunque las bandas participantes son de medio mundo (incluyendo, de Argentina, Smocking Flamingo, The Crabs con Andrea Prodan y... un servidor), el sello en cuestión es español, basado en Alicante, cerca de Valencia. Su agitador es el inefable Dr Jau, uno de "esos" personajes que nos da esta música y que he tenido el gusto de conocer y de tocar con él en Madrid el año pasado. Porque Jau no sólo es un exitoso megaempresario magnate de la industria musical sino que también es un notable guitarrista. Como muestra vayan sus grabaciones como solista y al frente de Le Grand Miercoles, un original proyecto que le gustará mucho a quien tenga debilidad por dos sabores no suficientemente maridados: la música jamaiquina y el surf (escuchen la inlamable versión guitarrera de "Christine Keeler", por ejemplo).

Hay varios discos tributo a los Clash. Pero este ajusta un poco el concepto, con una idea más específica que la de un montón de bandas haciendo cover, sin más. En este disco doble parece sobrevolar el objetivo de mostrar la relación carnal entre "la única banda que importa" con Jamaica. Quien conozca incluso sólo superficialmente la obra de Strummer-Jones, estará al tanto de su gusto y, sobre todo, su buena lectura de los sonidos jamaiquinos presentes en la Inglaterra de fines de los setenta, y muy concretamente sus múltiples colaboraciones con el gran Mikey Dread.

Aquí, una charla-entrevista con Jau, con todos los detalles sobre este discazo de tapa roja, masterizado de punta al punta para el mundo aquí nomás, a un par de cuadras de la Plaza Flores, por Jochi Descalzo, y por cierto en venta en Argentina vía Una Isla Club. O bajable, sin ir más lejos, acá.

1. ¿Cuándo tuviste la idea de hacer este disco?

Básicamente, la idea de tributar a The Clash en clave jamaicana está en mi cabeza incluso desde antes de fundar el sello. Y The Clash es mi banda de cabecera desde mucho antes de colgarme una guitarra. Como muchos, mi primera pasión musical fue el punk y The Clash son el puente ideal para llegar desde la distorsión hasta los sonidos caribeños.

2. The Clash, dos vinilos, muchas bandas de distintos países... ¿En algún momento el proyecto se volvió tan grande que peligró su salida?

Sí, ¡definitivamente sí! De hecho, en un principio fue un proyecto mucho más pequeño que fue creciendo conforme más bandas se sumaban. Resulta que soy muy cabezón y aunque la tentación de tirar la toalla siempre amenaza, ¡no hay que dejarse vencer!

3. ¿Le llegó el disco a allegados o familiares de Strummer y a los propios ex Clash?

Sí, tengo constancia de que tanto la viuda de Strummer como Simonon y Mick Jones tienen sus copias y están encantadísimos... En las propias palabras de Simonon “se nota que está hecho con mucho amor y pasión, además de seguir una filosofía de DIY muy acorde con The Clash".

4. ¿Qué es The Clash para vos?

¡La única banda que realmente importa! (con permiso de Skatalites, The Jam y Ramones)

5. Qué es Golden Singles Records?

La mejor manera que jamás he encontrado de perder dinero, horas y salud... jejejejejeje... En serio: un sello hecho por músicos amantes de la música para otros amantes de la música, en su gran mayoría músicos, la verdad. Pero no solo, evidentemente.

6. Entiendo que el disco se agotó. ¿Pensás reeditarlo?

¡Buena pregunta! El disco está inminentemente agotado... El tema de la reedición es peliagudo pues no soy muy amigo de reeditar, siempre prefiero pensar en cosas nuevas que sacar. Pero la verdad es que la demanda ha sido tal que la reedición empieza a ser una necesidad… Me doy un tiempo para meditar sobre ello y tomar una decisión... ¡Aun no lo sé!

7. ¿Hay algún tipo de continuación del proyecto? ¿Otro tributo, por ejemplo? 
La idea es dar continuidad con un volumen 2. El repertorio de The Clash y la cantidad de bandas que han quedado fuera lo están pidiendo a gritos.

8. ¿Cuántas ediciones tiene ya Golden Singles? ¿Lo llevás adelante solo o tenés socios?

Ediciones 100% Golden Singles Records ha habido las siguientes: - David Hillyard & The Rocksteady 7 (single 7") - Dr.Jau & The Peanut Vendors (EP 7") - Sensi Simon & The Golden Singles Band (Single 7") - Mr.T-Bone & The Young Lions (Single 7" co-edición junto a Mad Butcher) - Red Soul Community / Gren Room Rockers (Single 7" co-edición junto a Jump Up Records) - Bandits (LP 12" co-edición junto a Liquidator y Jamaican Memories) - Le Grand Miercoles "This is Surf-Steady"(Lp 12") - VV.AA The clash Goes Jamaican (Doble Lp 12")

Digo 100% porque además hemos colaborado en alguna que otra edición en formato CD como por ejemplo Sensi Simon & The Samowar Big Band y Dirty Soul Riders. Si todo va bien a lo largo de los próximos meses editaré el nuevo LP de Le Grand Miercoles y mi proximo disco en solitário como Dr.Jau.

A la segunda parte de la pregunta es fácil contestar... Este fue un proyecto que inicié junto a amigos con los que compartía banda y que poco a poco se han ido descolgando para colaborar esporádicamente, por lo tanto la respuesta es que a día de hoy soy el culpable de todo esto.

1. La verdad es que las bandas locales (digo, argentinas) vienen dando unas producciones que no se habían visto (ni oído) antes. Aunque no es exactamente nuevo (salió a mitad de este año) no hay que dejar de nombrar el single "split" (una banda por lado) que editaron Aggrotones y Gigantes Magnéticos, vía el sello Jewels, que entiendo que es canadiense.

Personalmente, me encantan los singles y me gustan particularmente los splits. En este formato, la banda pone absolutamente todo lo que puede, concentrado en 3 minutos, no a lo largo de 16 temas más seis bonus tracks y 1 tema oculto. No, acá no hay joda: sólo un tema, sólo una oportunidad, one shot.

Esa parece haber sido la filosofía de Aggrotones y Gigantes, por que la verdad es que el producto es un disco con dos "lados A", es decir que los dos temas son protagónicos. En el caso de Aggrotones, con Carl Levy's Mood, uno de sus típicos instrumentales organísticos, que pareciera que cada vez que graban uno nuevo suena un poco mejor que el anterior. Bah, no parece: es así. 

Por el lado de los Gigantes, con una tremenda versión de Troublemaker, con la voz de Pety, de Riddim, y, creo, He-Man (Humanidub). 

Como si eso fuera poco, el vinilo es... AMARILLO! Dentro de un elegante sobre negro y con una galleta muy buena también.

 Más, por favor!

2. Los últimos días, otros créditos locales de la industrial del vinilo, The Crabs, estuvieron de gira por Brasil. Y próximamente estarán en Chile. Guau. Disculpen que hable una y otra vez de los Crabs, pero realmente me parece que están en un gran momento. Fuentes de Satelite-In-Blog sin relación alguna con The Crabs, estuvieron en los shows de Curitiba y San Pablo y coincidieron en que arrasaron.

3. Quien se encuentre en Argentina este fin de semana, no deje de leer el suplemento Turismo de La NAción, hoy, anteúltima página. No digo más.

Si el rap en castellano (o en cualquier otro idioma que no sea inglés) es todavía, en alguna medida, una rareza, una expresión globalmente marginal, ¿qué se podrá decir entonces de un disco de hip-hop que comienza con un solo de charango?

Así son justamente los primeros segundos deTradiciones , tercer trabajo independiente de Iluminate, el proyecto de hip-hop más prolífico de la aún underground, aunque creciente escena argentina. Ese arranque, además de sorprender, marca el tono de un disco no necesariamente de fusión hip-hop folklórica, pero sí lleno de libertad creativa y juego, de minucioso conocimiento del género, pero también de exploración. Algo no menor dentro de un gueto como el del hip-hop, con códigos tan claros y cultores ortodoxos.

Formado en 2006, Iluminate consiste en una efectiva delantera de rapers (actualmente, Manu, Tano, Tío y Siak), más el percusionista-director y productor musical Diego Guagnini. En vivo, sin embargo, no dependen de bases grabadas, sino que se apoyan sobre una banda completa, de "tracción a sangre", sección de vientos incluida. Sus dos primeros discos, Iluminate (2006) y Luminareas (2008), los proyectaron como el principal emergente de un mundillo de MC (vocalistas), DJ, b-boys (bailarines urbanos) y artistas de grafiti cada vez más numeroso y movedizo, aunque sólo esporádicamente visible en el prime time , a nivel masivo.

Después de girar por Brasil, Chile, Paraguay y Colombia, Iluminate son sin dudas abanderados del hip-hop local. Pero, paradójicamente, lo que los hace más interesantes son los pasos adelante, ampliando los márgenes del género, que logran dar con cada nuevo disco. Con recursos como el del charango de Oscar Miranda sobre una base de bombo legüero, por caso. Así, Tradiciones es un título intencionalmente ambiguo, que se refiere a la tradición del hip-hop y, a la vez, al DNI argentino y a los rasgos latinoamericanos. Y cada track parece un nuevo planteo de la misma cuestión: cómo resolver esa tensión entre una subcultura, en principio lejana, y el ADN propio. Semejante dilema se refleja hasta en la tapa, en la que no hay fotos a lo gánster de Los Ángeles ni callejones del Bronx, sino una serie de paisajes entre andinos y patagónicos.

En principio, los Iluminate insisten en rapear no sólo en castellano, sino "a la argentina". Incluso cuando en el tema "La posta" irrumpe un raper invitado de Providence, Estados Unidos, que termina rimando subte, Quilmes y mate. Por el lado estrictamente musical, otro argumento para la supremacía Iluminate en el panorama local es su ductilidad, más allá de cualquier género. Tradiciones sólo acrecienta esa distancia con el resto de la tropa, gracias a tracks como "La calle sabe" (primer single), "La rumba" (con su guitarra española) o "Ska" (con la asistencia experta de Cotter, de Ska Beat City). Ejecución precisa, sonido pulido y producción simplemente exuberante, en la que es evidente la doble personalidad de Guagnini como percusionista y hombre detrás de las perillas.

El espíritu de búsqueda aparece también en la lista de invitados, encabezada por extraños al universo hip-hop como los integrantes de Los Cafres (la voz de Guillermo Bonetto brilla en "La selva"). Viejos aliados, los referentes del reggae han estado presentes siempre por lo menos en un track desde el primer CD de Iluminate, banda que ha sabido compartir escenarios con músicos de Intoxicados o Cabezones y ha versionado en clave rap algún clásico de... ¡Pappo! Siempre, claro, para luego volver al gueto, con ideas frescas para iluminar el club del hip-hop local.

 (Iluminate ha colaborado en los últimos años con Satélite Kingston, durante shows en vivo, como el del festival Creamfields, por caso, y en discos como "Mensajes" y "El enemigo", en voces y percusión. También colaboraron con Ska Beat City)

Por Chikito, desde Chichester, UK

En el artículo de hoy me propongo muy brevemente contarles mi experiencia en esta prestigiosa carrera de bicicletas plegables, que una vez al año desde fines de la década pasada hace furor en el Reino Unido y también en varios otros países.  Como queda en evidencia, es la primera vez que “corro” sobre dos ruedas, pero aún más importante, es también la primera vez que me propongo evitar por todos los medios que me roben la bicicleta (llevo tres en mi historial, dos allá y una acá).  Así que ésta jamás, ésta la llevo al trabajo y la meto debajo de mi escritorio.

Luego de varios meses planeando un riguroso entrenamiento, finalmente llego el día de la competencia, con mucho sol, mucho calor y también algo de lluvia, infaltable en cualquier evento al aire libre. Las condiciones eran un tanto duras, pero hubo que adaptarse a las reglas y pedalear respetando el clásico “dress code” de Brompton: camisa, saco y corbata, con cualquier tipo de variación posible, hasta lo menos imaginable. Todo muy vistoso, incluyendo la largada al mejor estilo Le-Mans.

Las Brompton son ni más ni menos que el motivo y el elemento en común de una tribu urbana más. Ni la música ni nada en especial tiene mucha importancia, solo la necesidad de independizarse un poco del transporte público, agilizar el desplazamiento por la ciudad o simplemente divertirse.  Y como escuché a alguien decir por ahí, participar en el Brompton World Championship es como ir a una convención de Elvis Presleys y sentirse uno más – ya nadie te va a mirar raro por las ruedas chicas, todos están en la misma.

Por supuesto que el entrenamiento del que hablaba quedó en los planes. Fue toda una ilusión que nunca ocurrió y sin dudas se comenzó a sentir mucho antes de completar la primera de las cuatro vueltas al circuito. Y al ser yo un inexperto absoluto, hubo detalles que fui descubriendo sobre la marcha – pequeñas cosas que van ocurriendo mientras el desgaste físico hace lo suyo; desde darme cuenta de lo eterna que se hacía cada vuelta, hasta la desmotivación que uno siente al ser pasado como si nada por los ciclistas más experimentados y/o entrenados. Y debo admitirlo, me pasaron tipos de más de 60 años… no solo eso, sino hasta mujeres de esa edad.

Así y todo, en el último tramo me propuse defender el honor. El objetivo era no dejarme ganar por la mujer de sombrero, medias caladas y tacos que tuve adelante todo el tiempo. Y lo logré, la sobrepasé en la recta final, en una reñida lucha de más de 40 metros… aunque lamentablemente no fue suficiente para mejorar mi pésima actuación. Si alguno quiere reír (o llorar), puede ver los resultados online. Está todo publicado en algún rincón de internet que por supuesto no develaré.

También hubo premios para los más elegantes.  En la foto de abajo, los zapatos del merecido ganador…