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Ocurrió en Saavedra

saavedra 054baja.jpgVivo en un barrio de clase media, despojado, o más bien libre de la mínima cuota de glamour y o drama características de otros barrios. Saavedra es un barrio bajo, pero no en el sentido típico del término, sino por sus discretas construcciones de escasa altura. Casas, en muchos casos del tipo “chorizo”, típicamente porteñas y típicamente de otros tiempos.
En ese contexto, la calle en la que yo vivo es una calle típica de Saavedra. Y la cuadra en la que yo vivo es una cuadra típica de esa calle.
La mayoría de mis vecinos debe estar entre los 60 y los 80 años. Y por edad, por aspecto y por rutinas, parecen estar jubilados. Los anteriores propietarios de mi casa, un empresario holandés y una maquilladora argentina, relativamente jóvenes, con un período anterior de residencia en el sudeste asiático, debían sentirse bastante fuera de lugar en este barrio, en esta calle, en esta cuadra y en esta casa. De hecho, no lo disimulaban: durante nuestra transacción se referían a Saavedra como “el barrio Coccoon” y se mostraban disgustados con el perfil de los vecinos, con su tiempo libre para ocuparse de los asuntos del prójimo, con sus intromisiones. Y eso que querían vender. Entiendo por qué.
Así las cosas, en los últimos días sucedió algo no tan rutinario en esta parte de la ciudad. Uno de mis vecinos, que vivía justo frente a mi puerta, murió.

saavedra 053baja.jpgEsto no es raro por sí solo, desde ya. El tema es que se trataba de un hombre especial. De unos 70 años, en apariencia, pelado de cara blanca, panzón, estatura ligeramente debajo de la media, solía pasar las horas de sol sentado en el escalón de la puerta de su casa. Una de sus esas casas de las que hablaba antes, porteña hasta la cerradura: una planta, sin jardín al frente, revestimiento de piedra blanca o grisácea, un puerta de entrada simple y otra puerta para un auto, que tenía su cartel de “prohibido estacionar, garage”, pero que no guardaba coche alguno. La vereda ni siquiera contaba con el desnivel necesario para que un vehiculo acceda a la propiedad en condiciones normales.
El hombre ostentaba un aspecto invariablemente desalineado. Era difícil precisar si contaría en su casa con agua corriente o cuarto de baño. Y tenía cierta facilidad para las combinaciones de vestuario menos probables (ojotas con medias, por ejemplo).

Y un detalle más: el hombre era mudo. Cada vez que me veía salir de casa, me saludaba con una mano en alto y un intento fallido, pero sincero, de sonrisa. En ocasiones, cuando era de mañana, además de saludarme me avisaba si había olvidado de apagar la luz que por la noche ilumina mi puerta. Para esto, me alertaba con unos cuantos gestos agitados y con unos sonidos que no calificarían para el sustantivo “voz”.
Así fue como supe que el vecino no podía hablar. Parecía satisfecho con esta especie de función que tenía, de avisarme lo de la luz. Y a mi me parecía una actitud algo cándida de su parte. Me recordaba a mi mismo, a los 7, 8 años, ansioso por avisarle a mi abuela si una de sus gallinas había puesto un huevo en el fondo de la casa…
Una noche, hace unas semanas, a eso de las nueve, se colaron por la ventana de mi living las luces de un patrullero. Me asomé entre las cortinas ysaavedra 024baja.jpg vi a media docena de policías alrededor de la puerta del mudo. Debían ser de la comisaría que queda a unas cinco cuadras, derecho por la misma calle de casa.
Me asusté, pensé antes que nada que habían entrado a su casa a robar quién sabe con qué consecuencias. Pero en un rato averigüé con un vecino la verdad: al mudo lo había encontrado muerto en su casa una “sobrina” que había ido a visitarlo.
Me dio mucha pena, realmente. Al fin y al cabo, teníamos cierta complicidad con el hombre. Aunque no me permitiera estacionar el auto delante de su falso garage. Evidentemente, nunca pude preguntarle por qué. Eso pensaba justo antes de darme cuenta que nunca supe tampoco su nombre. Los policías y los vecinos curiosos y quizás algún pariente no tardaron en dispersarse. Pero los días y las noches siguientes, más o menos por una semana, un policía se mantuvo de guardia en la puerta del mudo. Puerta que entonces estaba cruzada con fajas que decían “secuestrado”.
Me pareció raro, pero la verdad es que no sabía a ciencia cierta cómo se porcedía en casos de muertes como esta. Así que mal podía saber si había algo ahí fuera de lo habitual.
Lo que también se vio desde entonces fue un desfile de personas que no había notado nunca antes en la casa del solitario mudo. El hombre, que en vida había dado más bien la imagen de un ser indeciblemente sólo es este mundo, de pronto parecía tener una rica red de parientes y otras relaciones. Uno de los policías de guardia comentó por lo bajo en un típico mediodía de Saavedra: “El viejo se murió sólo pero ahora le aparecieron familiares por todos lado”.
Los parientes, claro, venían a ver la casa. A ver qué podía haber quedado adentro, a ver qué se podían llevar. El viejo los hubiera echado a escobazos entre gritos incompresibles.

saavedra 045baja.jpgEl policía dejó de hacer guardia unos días después y la típica cuadra de la típica calle de Saavedra retomó su aburrida normalidad.
Pero un par de meses más tarde me sorprendió volver a ver un agente apostado, día y noche, frente a la casa del mudo.
Sin hacer el menor esfuerzo, no tardé en enterarme de nuevos y trágicos giros en los acontecimientos. Sucede que, como suele pasar, a una vecina, otra jubilada, las Fiestas 2011 más bien la desanimaron. Así que hace más o menos una semana, esperó a que su marido saliera a hacer unas compras, escribió una breve nota explicativa, subió a su terraza y saltó.
No fue su día de suerte. O sí, según cómo se vea. Porque la doña no logró su desesperado cometido: cayó y se rompió unas cuantas cosas, sí, pero sobrevivió.
Lo curioso fue que la fallida suicida aterrizó en otra terraza, más baja que la propia; nada menos que en la propiedad, o ex propiedad, del mudo. Así que alguien dio aviso y las fuerzas del orden se hicieron presentes, destrozaron la puerta de entrada de la casa del difunto y “rescataron”, para bien o para mal, a la señora, que ahora está en terapia intensiva en algún hospital de la ciudad. Le dicen "Pili", y las otras señoras del barrio parecen conocerla bien.
Como la puerta quedó destruida y la propiedad estaba en litigio por los supuestos herederos del mudo, se hizo necesaria la presencia de un cana.

Así las cosas, volvía yo los otros días a casa cuando me interceptó un oficial. Adiviné en seguida: me necesitaban de testigo para entrar en la casa del mudo y cerrar el asunto.
Estaba con ellos un supuesto primo hermano del muerto, que parece tener las de ganar en el juicio y que acusa a sus litigantes de no ser parientes directos ni indirectos. “Sólo lo venían a cuidar una vez saavedra 036baja.jpgcada cuatro días”, me dijo, quejándose, "Y ahora reclaman que tienen un testamento firmado por él". No lo hizo explícito, pero por el comentario, me pareció entender que él no iba a ver al mudo nunca, pero que igual tenía más derecho por ser pariente.
No me cayó del todo bien, el tipo, pero mientras esperábamos a otro testigo (el hijo de otro vecino, un ex policía sin piernas al que todos los santos días visita una ambulancia para hacerle quién sabe qué en lo que le queda de cuerpo), aproveché para enterarme más de la vida del difunto. Parece que había trabajado en una fábrica, como tornero, hasta los 60 años, cuando se jubiló. Había vivido siempre por el barrio, pero no en la misma casa. Se había mudado acá con una tía solterona. El tampoco había tenido hijos. La tía murió hace unos tres o cuatro años. El se quedó solo, y su calidad de vida se vino un poco más abajo. Yo lo conocí en esta última y fatal etapa. Ni siquiera se sabe bien qué fue lo que lo terminó. “Paro cardiorrespiratorio”, se dice, para no decir nada: siempre que uno muere, así sea envenenado y aplastado por un piano que cae de un quinto piso, resulta que muere porque el corazón y el sistema respiratorio dejan de funcionar. Así que uno siempre muere por un “paro cardiorrespiratorio”. Así que el mudo murió, de última, de lo mismo que vamos a morir todos.
En tales cuestiones existenciales andábamos cuando por fin fue tiempo de entrar en la casa maldita. Eran muchas las fantasías que tenía acerca del interior de la vivienda. Y esta era una oportunidad verdaderamente única para chequearlas a gusto y a la luz del día, de ejercer un voyeurismo permitido, más bien alentado y custodiado!

La situación era un poco “CSI”; todo estaba intacto, congelado en el último instante de vida del mudo. El primer ambiente era un living, el clásico “estar” del jubilado de clase media baja porteño. Una mesa redonda con mantel de hilo, unos sillones inservibles, paredes cubiertas por Corlock, docenas de recuerdos berretas de San Clemente, Villa Carlos Paz, Merlo, y otros destinos de turismo pobre, o más o menos. También había un televisor con dos videocassetteras, muchísimos papeles apilados y videocassettes con el logo de la revista Gente. Por lo menos en dos paredes del living había pegados unos papeles con la inscripción “Mayi” y un número de teléfono de siete dígitos, como si se tratara de alguien a llamar en ciertas ocasiones no del todo infrecuentes. ¿Sería la que lo encontró muerto y ahora dice tener su testamento?
Luego había un baño en condiciones muy decentes y una cocina que no pasaría ninguna prueba de salubridad e higiene. Para mi sorpresa, al fondo continuaba un buen jardín, con muchos árboles y una parra, aunque en condiciones medio salvajes, que de todos modos hacía relativamente valiosa a esta propiedad. Al ver una buena cantidad de grandes limones en el suelo, uno de los policías comentó, aburrido: “Con lo caros que están…”

Junto al parque había un pequeño taller, lleno de pinturas, materiales varios y lisa y llanamente basura, ya no como parte de la estructura de la casa, sino en una casilla de madera aparte. El escenario perfecto para el crimen del psicópata de una película norteamericana.
No vimos el cuarto del difunto ni el punto de impacto de la suicida. Y salimos de nuevo a la luz del mediodía de Saavedra, el barrio más aburrido de Buenos Aires.

Comments

  • Si no la viste Daniel, mira urgente la Peli Hot Fuzz !!, ya veras porque tiene que ver con tu barrio!

  • Muy buena entrada, Dani!

  • Que lindo que es vivir en un barrio donde, a pesar de la apariencia aburrida, siempre suceden cosas de forma solapada. Historias que el tiempo deformará hasta el infinito convirtiendolos en Mitos Urbanos: http://springlinejamaica.blogspot.com/2011/01/maroon-town-urban-myths-to-be-released.html

  • me encanta leerte... el caso aún no està cerrado...

  • Pobre la Pili!

  • Muy buena cronica!

    Me copan las casas como en la 3ra foto... bien renovadas, manteniendo el estilo de aquella epoca y demas, son reliquias arquitectonicas. Lamentablemente he visto como en BsAs han demolido cosas asi o inclusive con mas historia y con mas onda. Un crimen total...

  • Gracias por leer, esta no era fácil, eh, quedó larguísima!

  • Antes Carlitos Bala decia: Lastima que no puedo compartirlo!!!! Sa sa sa sa sa Sa!!!

    Pero ahora se puede!!

    Este comediante esta a la altura de Seinfeld o Larry David, es Ricky Gervais.
    Miren el Monologo que se mando! destrozo a todos!!

    http://www.youtube.com/watch?v=04Lzn7BVLPM

  • genial. Hay versiones subidas de ese monólogo que ya tienen dos millones de vistas. Y fue ayer!!
    Tienen que ver la película "The invention of lying", producida y protagonizada por Gervais. Es fenomenal.

  • Todavia no me termine el primer parrafo....

    PD: esa pelicula es mortal Flores.

  • La otra que me gusto un poquito menos fue Ghost Town, aunque es recomendable tambien.

  • de acuerdo con chikito, qué te puedo decir? acá acabaron con el 80% del patrimonio arquitectónico o de "epoca"... hoy en día intentan rescatar lo que queda, pero esta ciudad es demasiado moderna y gris... tienes que irte a los pueblitos para ver cosas así... imagìnate que por eso es que me encanta Bs As, precisamente por eso...

  • Ah, el mudo se llamaba Jorge.

  • Muy bueno el monologo, yo había visto algunos anteriormente con un tinte más político (a veces) y también social y mundano, pero siempre muy irónico.

  • http://www.youtube.com/watch?v=e7b9-o7OaeU&NR=1

  • muy bueno lo de saavedra, a mi me gustan los barrios asi, ya se pondra de moda y tambien putearas porque dejo de ser cocoon, eso le pasó a palermo garcha un poco

    tiene algun centrito por lo menos?

  • 2011: ya se la puso Duhalde, ahora se la pone Barreda, mamasita!!!
    Otro verdadero Rude Boy:

    http://img404.imageshack.us/i/barredaperry.jpg/

    Creditos a Rudy Ska que justo saco la foto a la TV, asi como la de Cobos. Tremendo Documento!!! jaja!
    Saludos!

  • la fred perry no se mancha.

  • Muy bueno el relato! Me atrapó! Cuando era chico vivía en mi barrio de infancia (Colegiales) un sordito (sordomudo en realidad) que andaba todo el día con la bolsa de plástico (esas colorinches con manijitas redondas, la ubican?) y se la pasaba dándole de morfar a las decenas incontables de gatos (felinos, no malinterpretar) que tenía... Cuando leía de este mudo me asaltó ese recuerdo, qué loco...

    Colegiales hace unos 20 o 25 años era bastante parecido a la descripción que hacés de Saavedra... Hoy se "achetó", se llenó de lofts, estudios de cine y televisión, Ideas del Sur y tinelismos, Julianes Weichs, Florencias Peñas, etc. Prefiero aquel barrio típico... Si Ray Davies hubiera vivido en Colegiales y ve el barrio tan cambiado hoy, se haría un discazo, jajaj....

    Che, Cobos, Duhalde, Barreda... Qué bajón!!! Hay que recuperar la Fred Perry!! La Fred Perry no se mancha!! Jajaj...

    Qué grande Rudy Ska y su flash instantáneo!!

    Saludos a todos/as!!

  • Listo.. con Duhalde y Barreda entramos en la categoría de pesos pesados, Moyano ó Barrionuevo de unen al club en cualquier momento.

  • Una cosa: nunca entendí bien si la frase "la pelota no se mancha" quería decir:

    1. Que la pelota no se puede manchar, que no es posible mancharla.

    2. Que la pelota no se DEBE manchar, que no corresponde hacerlo, que no está bien.

    Cuál de las dos cosas significa? realmente no lo sé.

  • no estoy capacitado para responder esas preguntas. dos motivos: 1- odio las frases hechas. 2- odio las conversaciones sobre futbol, incluyendo las de los programas de tv/radio (y de ahi salio esa maldita frase, no?)...

  • Es que medio que ya excede lo futbolístico, se usa para cualquier cosa, o por lo menos para varias cosas... La fase es de Diego Armando, armando frases hechas

  • Flores, creo que era la segunda opción.. aunque con DAM nunca se puede estar seguro, es más, tampoco es sano llevarle el apunte demasiado, a veces se torna incongruente su optica, va de una punta a la otra en la misma oración.
    Que lindo sería que Ricky Gervais hiciera un monologo sobre el fútbol argentino.

  • voto por la 2

  • pero diego armando tiene buenas frases... una de las mejores para mi fue "se te escapo la tortuga".... es genial!

  • Mi interpretación de la famosa frase (que hasta el momento que la pronunció no era una frase hecha, él la inventó y luego se popularizó y se transformó en frase hecha... Maradona tiene esa extraña capacidad también) es que el fútbol como juego y como deporte no tiene la culpa de los errores o cagadas de quienes lo interpretan... Es decir, como que el juego es algo sano y que lo no-sano no es ocasionado por el juego... onda "la pelota no tiene nada que ver, la pelota no se mancha", sigue siendo un juego noble a pesar de toda la corrupción, negocios, intereses, frivolidad, etc, que lo rodea...

    La frase completa, en su contexto es la siguiente: "El fútbol es el deporte más lindo y sano que existe en el mundo. Eso no le quepa la menor duda a nadie. Porque se equivoque uno no tiene que pagar el fútbol. Yo me equivoqué y pagué. La pelota no se mancha." Diego Maradona.

    http://frasesfutboleras.blogspot.com/2005/10/la-pelota-no-se-mancha.html

    Esa capacidad de resumir una idea en una frase simple me parece realmente una genialidad, Maradona ya es un personaje mas allá de haber sido el mejor jugador de futbol de la historia. Sus opiniones cambiantes sobre temas varios y algunas actitudes medio mamarracho no empañan todo lo que nos ha dejado, para mi gusto...

    Por lo menos así lo veo yo (como diría el inefable Guillermo Nimo)

  • A DAM le adjudican desde hace mucho tiempo una frase tambien: "traemelo al pibe"...creo que el contexto era en un barquito con el Guillote y un famoso cantante latino. Pero que se yo, vieron como son las malas lenguas...

  • Hoy toca Ska Beat City & Lord Fyah en el Especial, nos vemos ahí amigos.

  • Este blog cada vez mas reaccionario, perdon, perdon

    Algunos de los que escriben cada vez mas reaccionarios

  • ?

  • Buena, Augusto, ahora sí.
    hablando de torugas que se escapan, el otro día se escapó una por mi casa. llegó a dar la vuelta manzana... Casi diría que es el colmo de Saavedra: que las tortugas se escapan y nadie las alcanza...

  • Daniel, lo que escribiste es de una calidad dificil de encontrar en los medios de comunicacion. Te felicito enormemente por la calidad literiaria y por tu ojo para ver la historia.
    un saludo
    fede

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