Qué injusto sería que pasaran inadvertidas cosas como estas, que no suelen aparecer en los suplementos de los diarios ni en las revistas de rock ni son comentadas por Pergolini en la radio… Pero que, en mi humilde punto de vista, pueden ser más interesantes y significativas que los “logros” de otras bandas que cuentan con apoyos de sellos, productoras, multitudes de fans o, por lo menos, padres con cómodo pasar económico.
Hace unos días, los Aggrotones volvieron de su primera gira por México, nada menos. Los ases del early-skinhead reggae local sí que lo están haciendo bien. Disco debut, dos singles vinílicos (uno en la gatera), viajes, muchos shows y, al fin y al cabo lo más importante, cada vez mejor música.
“Conocimos muy buena gente, que se nos acercaba pidiéndonos que volvamos a México. Hasta firmábamos autógrafo, y no sólo en los CD y los pocos vinilos que nos quedaban: Cristian (bajista) firmó una Harrington y Cuchi (batería) firmó una camisa!!”, cuenta Kevin, guitarrista y espíritu inquieto del grupo.
Varios shows, tres horas de cama horas por día. “Siempre había algo para hacer… Así y todo se disfrutó mucho. Nos cubrieron todo: hotel, transportes y pasajes”, dice Kevin.
Entre otra gente (Greg Lee, de Hepcat!!), los Aggro tocaron allá con el increíble Teddy García, célebre (ex) tecladista de los célebres Granadians (BRILLANTE, el nuevo disco). Teddy ahora vive en Estados Unidos y ya no está con los granadinos del espacio exterior, pero tiene banda nueva: The Shifters. También con King Crab, un DJ mexicano del que se han escuchado algunos audios por Buenos Aires. Yo creo que el Visón, The Crabs, alguna vez me mostró lo que hacía… Kevin: “Tiene todo su sound system y hace lo que hacían los djs jamaiquinos, pero ahora y en español, con mucha cultura de DJ y de reggae. Lo invitamos a cantar 2, 3 temas por show”.
“Comidas, hotel, etc, todo bien. Obviamente, viste como es una gira, hay momentos y momentos. Hay cosas que están perfectas, y otras que hay que pelearlas un poco. Pero estuvo muy bueno todo. La verdad, más que interesante la experiencia… Una tarde nos escapamos y nos fuimos a las ruinas de Teotihuacan. Impresionante!”, dice Jochi.